Muchas aseguradoras tradicionales de vida están evolucionando hacia compañías de servicios financieros: cambian sus nombres corporativos e identidades, su objetivo, amplían su gama de productos para incluso vender productos bancarios, todo ello animadas por las tendencias del mercado. Sin embargo, otras empresas han optado por mantener su objetivo corporativo e identidad como aseguradores de vida y como mutuas. La ponencia analiza estos casos.