Interlife Assurance, aseguradora británica, tendrá que pagar 30 millones de multa, impuesta por Lautro, por engañar supuestamente a un grupo de clientes ofreciéndoles información financiera falsa. Este caso no es una excepción. La SIB estudia imponer nuevas reglas, más estrictas para las compañías, especialmente para los agentes