El objetivo del informe es determinar el perfil socioeconómico y demográfico del comprador de seguros de vida. Para ello se divide el informe en dos bloques: en el primero de ellos se analizan las características personales (sexo, edad, estado civil, localidad de residencia y profesión), mientras que en el segundo se analizan las características del contrato (modalidad, prima, capital, periodicidad de pago, forma de cobro y duración).