La conclusión del informe oficial elaborado sobre el accidente de circulación de Soria, el día 7 de julio de 2000, en el que fallecieron 27 personas, la mayoría jóvenes, es que el accidente se debió a un despiste del conductor del camión. El informe ha sido elaborado por el Instituto de Investigación sobre Reparación de Vehículos, en Zaragoza. En el momento de la colisión, el conductor o el acompañante del camión recibían una llamada telefónica a través del móvil.