La expansión del BSCH en Portugal y Reino Unido, con la compra del Banco Totta & Açores y Crédito Predial, y el aumento de participación en el Royal Bank of Scotland, ha provocado que el banco tenga que asumir unos elevados fondos de comercio que tendrá que amortizar con cargo a resultados. El banco se apuntará los beneficios de esas participaciones. Incluye los fondos de comercio del BSCH y del BBVA, pendientes de amortizar.