Las constructoras y promotoras deberán garantizar la calidad de las viviendas a partir de 1999. La Ley de Ordenación de la Edificación, diseñada por el Ministerio de Fomento, obligará a estas empresas a suscribir hasta tres seguros privados distintos para cubrir cualquier daño en caso de la ejecución defectuosa de una casa. El director general de vivienda, Fernando Nasarre, considera que la medida incrementará el precio de la vivienda entre un 1,5% y un 2%.