El borrador del nuevo IRPF vasco mejora el tratamiento de los fondos de pensiones y de los seguros de vida a medio y largo plazo, y empeora la fiscalidad de las EPSV que gestionan en el País Vasco 952.500 millones de pesetas. Los responsables de las EPSV proponen mantener la actual desgravación en la base de 20% de la aportación hasta un límite de 1,1 millones de pesetas, al igual que la deducción en cuota del 10% de la inversión que exceda de este límite. También reclaman que las aportaciones a las EPSV tributen como rentas de trabajo y el rendimiento como plusvalía.