El autor aboga por la importancia de la contratación de detectives privados para investigar los fraudes que se producen en el sector asegurador, teniendo como objetivo ahorrar costes en la cuenta de resultados y evitar desembolsar indemnizaciones innecesarias e injustas. Se ponen algunos ejemplos de actos delictivos en autos, vida, donde demuestra que las compañías deben blindarse contra el fraude, tanto de forma interna, con procesos de supervisión más estrictos, como contando con ayuda externa.