Fortis cerró el ejercicio 2008 con unas pérdidas netas de 28.000 millones de euros, cuando el año anterior sus ganancias habían sido de 3.910 millones de euros. La principal causa para ese descenso fue la reducción del volumen de su negocio bancario, con un resultado negativo en operaciones discontinuas de 27.400 millones de euros. Pese a la situación, Fortis resalta la evolución de su división de seguros en Bélgica, única que obtuvo beneficios.