El ‘Seguro de Explotación de Reproductores Bovinos de Aptitud Cárnica’ es una nueva modalidad en la que los ganaderos de vacuno de carne tienen la posibilidad de proteger, por primera vez, las pérdidas ocasionadas por diferentes epizootias como la fiebre aftosa. La póliza cuenta con una subvención del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que puede llegar hasta el 48%, a la que se sumará la que puedan conceder las Comunidades Autónomas. La primera opción del seguro cubre las grandes mortandades por cualquier causa, entre ellas la muerte o sacrificio obligatorio de los animales por encefalopatía espongiforme bovina y fiebre aftosa, así como una indemnización si, ante la aparición de un brote de esta última enfermedad, el ganado debe ser inmovilizado. La segunda opción cubre el exceso de mortandad de animales reproductores y recrías respecto a las pérdidas habituales que se producen en la explotación, cuando dicho exceso supere el 3% del valor medio de la explotación durante todo el período de garantías. Además, en una tercera opción, se puede proteger la muerte de las crías de las reproductoras afectadas por cualquiera de estas enfermedades siempre que se origine desde el inicio del parto hasta que tenga un mes de vida. Los ganaderos que así lo deseen podrán contratar una garantía adicional de saneamiento ganadero por la que, en caso de sacrificio obligatorio debido a las enfermedades de tuberculosis bovina, brucelosis bovina, leucosis enzoótica bovina y perineumonía contagiosa bovina, el seguro les compensa una parte del valor del animal que, junto a la compensación de la Administración y el valor obtenido en matadero, puede cubrir el valor completo del animal.