La FIFA muestra su preocupación por la dependencia que tendrá de los ingresos que genere la próxima Copa del Mundo, que se celebra el próximo mes de junio en Alemania, para contar con un sólido capital propio. En la actualidad, el máximo organismo del fútbol mundial muestra su temor al no ofrecerse un seguro que cubra todos los riesgos de cancelación de un evento de la magnitud de un mundial de fútbol. Tras los atentados del 11-S en Nueva York, las aseguradoras no quieren cubrir todos los capítulos que implica la celebración de eventos de esta magnitud.