No ha quedado acreditado en la instancia que las secuelas padecidas por el hijo de la recurrente -urticaria crónica y urticaria solar- fueran el resultado, como se pretende, de la administración de un determinado medicamento -cuya pautación era, por lo demás, médicamente procedente-, pues del extendo informe pericial emitido en autos se concluye que aquéllas eran consecuencia de la evolución de una patología con unos concretos antecedentes anteriores en el tiempo a la ingesta del medicamento en cuestión.