Isabel Tocino, ministra de Medio Ambiente, declaró en el Congreso que la constructora del depósito de agua de Melilla, que reventó cuasando la muerte a diez personas, es la responsable principal de la tragedia, aunque reconoce que la administración puede tener también parte de culpa. Fomento de Construciones y Contratas, propiedad de las hermanas Koplowitz y responsable de la contrucción del depósito, tiene un seguro con una cobertura de 3.000 millones. El riesgo, que recae principalmente sobre Plus Ultra, está repartido entre ocho aseguradoras y sus correspondientes reaseguradoras. La sociedad de peritación Revenga y Asociados será la encargada de la evaluación de los daños producidos por el siniestro.