La autora aborda en su artículo la situación en la que se encuentra el proceso de reestructuración de la banca española, que comenzó en 2009 y parece estar llegando a su fín. Sin embargo, alude a la situación de algunas entidades financieras que siguen preocupando: Es el caso de la venta de Catalunya Banc, cuyo proceso de subasta se ha suspendido en dos ocasiones y parece difícil, dado el escaso interés que despierta de no existir ayudas para el comprador por parte del Gobierno. En segundo lugar, NCG Banco, cuyo proceso de venta dio comienzo recientemente y, por último, está la fusión de Unicaja y CEISS en la que todavía no existe un acuerdo firme entre las partes.
