España vierte anualmente a la atmósfera un total de tres millones de toneladas de dióxido de azufre, por lo cual la legislación española sobre contaminación es taxativa y multa a las empresas contaminantes hasta con 100 millones de pesetas. La aseguradora Suiza de Reaseguros ha introducido en el mercado asegurador español, al igual que en el resto de Europa, el seguro anticontaminante a largo plazo. Esta póliza de responsabilidad civil esta diseñada especialmente para cubrir los gastos que provoca la contaminación gradual de los residuos tóxicos. La Administración española estima que 250.000 empresas deberían adaptarse al plan Nacional de Residuos Tóxicos, aunque hasta el momento sólo 5.700 han declarado los residuos que poseen, por lo que el mercado potencial de este tipo de seguros es enorme. En España ya existe un seguro de suscripción obligatoria de contaminación para los gestores de residuos, es decir, para los que almacenan, recuperan o eliminan estos residuos; sin embargo la Ley Básica de Residuos Tóxicos y Peligrosos estipula el carácter potestativo del seguro para los productores de estos mismos residuos. Las empresas que tratan residuos radioactivos tienen contratado un seguro de responsabilidad civil conjunto denominado "Pool Atómico".