Sentencia en la que se plantean cuál es el comienzo del plazo de prescripción para reclamar por responsabilidad patrimonial de la administración sanitaria del siguiente hecho: Un hombre ingresa en el hospital con un cuadro de dolor, se le hacen varios diagnósticos desde el año 2000 hasta el 2005. El perjudicado formula reclamación patrimonial en 2005, que es desestimada por la Consejería de Sanidad al entenderse que la acción estaba prescrita. En esta sentencia del Tribunal Supremo se intenta dirimir si la acción estaba prescrita, analizando si los daños eran permanentes o continuados e investigando la situación objetiva de la lesión.