El día 12 de Septiembre se publicó en el BOE, el Real Decreto 1507/2008, por el que se aprueba el Reglamento de responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor (en adelante el nuevo Reglamento) y que sustituye al anterior Reglamento, aprobado por el Real Decreto 7/2001, de 12 de Enero. Entre las novedades que contiene podemos destacar la nueva redacción de los preceptos que definen el concepto de “vehículo de motor” y “hecho de la circulación”. Estos dos conceptos son conditio sine qua non, para tener que aplicar a un accidente de circulación el régimen de responsabilidad civil previsto en el Texto Refundido 8/2004, de 29 de Octubre. En la práctica, se suscitan conflictos que se llevan a los tribunales, con el fin de establecer si un determinado accidente en el que interviene un vehículo a motor, es o no es un hecho de la circulación a los efectos de cobertura del seguro de responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor. Normalmente, es la compañía de seguros, quién en aplicación de la ley, que no del contrato, tiene que informar al perjudicado del rechazo de su reclamación en concepto de daños y perjuicios que pudiera haberse ocasionado como consecuencia de la responsabilidad civil del conductor del vehículo causante del accidente. La sentencia que a continuación analizaremos, nos permitirá tratar el tema del hecho de la circulación, particularmente, en un accidente entre dos vehículos, uno de ellos especial, mientras realizaba tareas propias de su industria.
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