El sector asegurador pagó en 1997 en concepto de catástrofes aproximadamente un billón de pesetas en todo el mundo, dos veces menos que en 1996. Aún así las catástrofes naturales y técnicas costaron la vida el año pasado a 22.315 personas y provocaron unas pérdidas económicas de unos 3,5 billones de pesetas, de los cuales sólo una cuata parte estaba asegurada. Las inundaciones en Europa del Este produjeron daños asegurados por valor de cerca de 155.000 millones de pesetas y en Estados Unidos tanto las tormentas como las inundaciones han supuesto el 46% de los daños mundiales. El fenómeno natural más costoso para las aseguradoras fue el huracán Fran, que causó daños por valor de 264.400 millones de pesetas en la costa este de Estados Unidos. La catástrofe con más muertos y desaparecidos fue el tifón Linda, que en noviembre de 1997 causó 3.840 víctimas en Vietnam. Las catástrofes técnicas, debidas a causa del hombre, representaron unos 400.000 millones de pesetas en daños asegurados.